ahora
me voy quedando sin recursos para poder gritar
y ya no tengo casi nada que me reviente las pestañas
ni los tímpanos
ni el corazón
tengo frío en las manos y en los pies
tengo terremotos en la voz
y los ojos frágiles como canicas de cristal
se me atraganta un nombre propio entre mil
y me maldigo cada noche por ser una estúpida
una estúpida entre mil
0 comentarios:
Publicar un comentario
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
<< Inicio